Cada vez con mejores resultados, se vuelve a utilizar la HIPNOSIS como instrumento de trabajo para profesionales de la psicología clínica, desde cualquier orientación: psicoanalítica, dinámica, fenomenológica o conductual.
El trabajo terapéutico, se realiza sobre la relación tal como se manifiesta durante la hipnosis. Una de las diferencias fundamentales entre la HIPNOSIS a principio de siglo y la utilización CONTEMPORANEA de la HIPNOSIS, es que no se persigue la obtención de fenómenos o respuestas particulares, sino bien al contrario, es una escucha atenta de lo que puede suceder en esta comunicación tan específica, en estas manifestaciones psicocorporales regidas por el mundo de las emociones, para poderlo trabajar en un encuadre terapéutico.
A través de la HIPNOSIS, se accede a los RECURSOS que han estado siempre presentes en las personas, pero que poco o nunca se han activado en estado de vigilia, de ahí viene la noción de: « …estado de conciencia modificada ».
Aunque el estado de HIPNOSIS viene desencadenado por procesos de pensamiento, como el sueño, también puede ser reforzado, modificado o desencadenado fisiológicamente por las drogas de ahí se demuestra su incidencia tanto en la físico como en lo psíquico.
Las investigaciones realizadas con los nuevos métodos e instrumentos de medida nos demuestran que los diferentes estados de conciencia que provoca la HIPNOSIS, se generan en un substrato psicofisiológico. Es por esto que la mayor parte de los estudios realizados sobre enfermedades, ya reconocidas como psicosomáticas, insisten en la importancia de asociar al tratamiento clásico habitual de la afección, una forma apropiada de HIPNOTERAPIA.
Agurtzane Urías Gascón
Psicóloga Clínica
Lda. en Psicología C.E-3136
Master en Hipnoanálisis e hipnoanalgesia
Por el Instituto Francés de Hipnosis en Paris
ABRIL del 97